.

lunes, 22 de febrero de 2016



10 películas pornográficas 

que merecen un Oscar








La industria de las películas pornográficas es una de las más importantes del mundo. No sólo por los grandes números en audiencia sino también por la cantidad de dinero que maneja, resultando en un negocio redondo para los productores, y en ocasiones, para los artistas. Los grandes planes de la industria incluso intentaron enviar una misión espacial para rodar un video porno en el espacio, plan que fracasó por falta de donaciones de los usuarios. Tal parece que los consumidores están dispuestos a consumir el material existente, pero toman pocos riesgos para invertir en un proyecto que parece no alimenta la fantasía sexual. Y aunque la piratería y la disponibilidad de vídeos en diferentes tubes, la industria encuentra su fuerza en las suscripciones, acceso a vídeos HD y producciones completas que nunca llegan a los canales gratuitos. 

Equiparado con Hollywood, la industria también cuenta con decenas de premios que buscan reconocer los mejores trabajos de las películas pornográficas. Uno de ellos son los AVN Awards, patrocinados por la revista Adult Video News, quien desde 1984 premia múltiples producciones, artistas, escenas, categorías especiales y categorías de marketing. Año con año, los grandes de la industria pornográfica se reúnen para premiar los mejores trabajos, ambiciosas producciones, mejores escenas anales y orales, e incluso producciones con alta definición y mejor fotografía. En una larga ceremonia y que podría suponer un despunte en la carrera de múltiples actores y actrices, 100 categorías reciben un premio que celebra la maestría de la industria para adultos

El auge de la pornografía en vídeo se remonta a la Edad de Oro estadounidense, que ocurrió en la década de los 60 y 70, y marcó el despunte del gran negocio. Títulos producidos en aquellos años mantienen su lugar como referentes en una industria que se inmiscuyó en el mundo de la mercadotecnia y el éxito comercial. De ahí se desprenden producciones que marcaron época, tanto por su “exquisitez” para presentar contenido sexual, su fino tratamiento del guión y la calidad narrativa de algunas piezas. Por estos puntos, Hollywood debería promover un premio especial para producciones pornográficas con calidad cinematográfica. (O no.) Aquí, un listado de algunos de esos títulos que merecen la codiciada estatuilla dorada.  



                                                                                
Emmanuelle (1974)
Just Jaeckin





Se estima que más de 300 millones de personas alrededor del mundo han visto esta película; aunque recibió crítica dividida después de su estreno. Basada en la novela homónima de Emmanuelle Arsan, la trama gira en torno a a Emmanuelle, una mujer que viaja a Bangkok para encontrarse con su esposo. Sin embargo, el viaje pronto se convertirá en una oportunidad para la protagonista de explorar su sexualidad en dimensiones que jamás imaginó. Sexo, violaciones y masturbación en la pantalla grande, convirtiéndose así en una de las películas pornográficas con mayor influencia en las décadas venideras y objeto de múltiples refritos y adaptaciones.







Garganta profunda (1972)
Gerard Damiano



 Con un elemento detonante más allá de lo científicamente posible, una mujer es diagnosticada de tener el clítoris en la garganta como consecuencia de una mutación genética. Ante la oportunidad de descubrir una importante fuente de placer, el personaje interpretado por la actriz Linda Lovelace decide satisfacer su deseo a través del sexo oral. La producción costó 47 mil dólares, pero su recaudación a lo largo de los años se estima en 50 millones dólares, y su éxito la convirtió en un referente del cine para adultos.






The Japanese wife next door (2004)
Yutaka Ikejima




Tras casarse con una bella, sencilla y carismática chica, Takashi decide mudarse con su esposa a la casa de sus padres. Emocionado por presentar a su mujer frente a la familia, el protagonista pronto se enfrentará a los incontrolables deseos ninfómanos de su esposa, quien no escatimará esfuerzos en convertir a toda la familia en animales sexuales. A pesar de tener decenas de escenas sexuales, la trama no pierde el humor, e incluso refleja parte de la idiosincrasia japonesa. 



Ginger en las rocas (1985)
Michael Cates




Uno de los grandes íconos de la industria pornográfica de los años 80, Ginger Lynn, interpreta a una joven adinerada que se enamora perdidamente de un jardinero pobre. Aunque su relación transgrede las clases sociales, ambos no escatimarán oportunidades para dar rienda suelta a las pasiones que les consumen. La actriz renunciaría al porno a finales de la década para buscar fortuna en películas independientes o de bajo presupuesto. Sin embargo, volvió a finales de los 90 para un segundo aire en la industria pornográfica.



La abertura de Misty Beethoven (1976)


Una de las películas pornográficas con mayor presupuesto en la historia fue filmada en diferentes locaciones de París, Nueva York y Roma. La trama nos habla de un sexólogo que intentará transformar a una prostituta carente de habilidades para su oficio en una diosa de la pasión. Contrario a otras películas, esta producción tiene uno de las tramas más desarrolladas pues está basada en dos obras de teatro: Pygmalion y My Fair Lady.  




Detrás de la puerta verde (1972)
Artie Mitchell




Esta producción fue la primer película estadounidense de distribución comercial en convertirse en un gran éxito comercial. La historia está basada en un relato anónimo que circuló en Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial en que una joven es raptada en un bar de carretera para convertirla en una bailarina erótica. El extraño proceso se desarrolla en un cabaret oculto tras una puerta verde, donde es hipnotizada y convertida en una maestra del baile. 



El diablo en Miss Jones (1973)
Gerard Damiano





El también director de Garganta Profunda conquistó al público adulto con esta cinta,
que cuenta la historia de la señorita Jones, quien decide suicidarse a los cuarenta años y siendo virgen. A pesar de llevar una vida “discreta” y alejada de los placeres, es enviada el infierno por el acto del suicidio. Ahí, el diablo decidirá darle una segunda oportunidad a cambio de su entrega a todo tipo de placeres, especialmente aquellos relacionados con el placer sexual.  










Chicos en la arena (1971)
Wakefield Poole







Se considera a este título como el precursor de la Edad de Oro del cine porno estadounidense, además de ser la primera en imponerse en el mercado. Rompió paradigmas pues a pesar de su temática homosexual, fue la primer película en presentar créditos y ha sido la única producción pornográfica que ha comprado anuncios en The New York Times. Con escasa trama, la película no escatima en mostrar escenas de sexo interracial y fantasías que van desde un hombre que surge del océano para satisfacer deseos sexuales, hasta un paquete que se convierte en un amante.  









Alicia en el país de las maravillas (1976)






Alicia, interpretada por Kristine DeBell, cae dormida mientras lee la obra de Lewis Carroll. En su sueño, el conejo blanco la guiará a un gran viaje de aventuras sexuales, con referencias a casi todos los personajes de la obra pero con alto contenido sexual. 







Caligula (1979)
Tinto Brass





Este listado no podía dejar fuera a la producción italo-americana que retrata el auge y caída del emperador romano Caligula. Producida por la revista para hombres, Penthouse, el objetivo de la publicación fue realizar una película pornográfica con una fuerte narrativa y valores de producción. Como se espera, la trama no deja fuera ninguno de los oscuros placeres romanos, la fusión entre el sexo y la muerte ni los deseos más sucios de un emperador cegado por el placer.  












Articulo de : http://culturacolectiva.com/









No hay comentarios:

Publicar un comentario